Cris Tales es un título desarrollado por Dreams Uncorporated y SYCK, un JRPG por turnos a la vieja usanza, es decir, tendremos que dialogar bastante para descubrir qué es lo que ha ocurrido y así poder usar nuestro inesperado don; viajar en el tiempo. Lo que más sorprendente de Cris Tales es precisamente ese don, pues tener la posibilidad de ver el pasado, presente y futuro de lo que nos rodea en la misma pantalla es un planteamiento muy original y llamativo.
Cris Tales nos permite caminar entre el tiempo
Nada más comenzar, nos pondremos en la piel de la jovencísima Crisbell, una risueña pero valiente muchacha que reside en el orfanato de la ciudad junto a sus amigas y la Madre Superiora, una mujer estricta pero siempre preocupada por sus niñas.
Aunque al principio nos veremos envueltos en una peculiar batalla, no tardará en venir en nuestra ayuda un misterioso joven, Cristopher. Durante esta corta pero intensa batalla, nos inundará una especie de recuerdo, es decir, la lucha que has presenciado es solo un pequeño adelanto de lo que te puede deparar en esta increíble aventura.
En Cris Tales te situarás en la ciudad natal de Crisbell y tras una fugaz visión de dicho lugar, te tocará ponerte manos a la obra. Una traviesa y elegante rana hará acto de presencia y nos pondrá en un aprieto, pues roba del jardín del orfanato una preciosa rosa que estábamos podando.
Tras una reprimenda por parte de La Madre Superiora por haber perdido la flor, tendremos que salir y explorar la zona siguiendo el rastro de pétalos que ha dejado la rana por toda la ciudad. Durante nuestra exploración podremos hablar con los habitantes del lugar y de paso preguntarles por el animalito, aunque muchos nos mirarán con un rostro un poco extraño, pues no es muy común que una rana robe rosas.
Siguiendo la pista de la rana llegaremos a la iglesia en donde, después de observar con expectación las maravillosas vidrieras que decoran el lugar y ver el increíble parecido que tiene con nosotros la muchacha de esas imágenes, un haz de luz nos rodeará para demostrarnos que ahora tenemos un increíble poder en nuestras manos: el de cambiar el pasado, presente y futuro. La misteriosa rana hará acto de presencia y se presentará como Matías, y a partir de ahora estará a nuestro lado ayudándonos en todo lo que pueda.
La aventura empieza aquí. En la misma pantalla podremos visualizar el pasado, en medio, donde estamos nosotros, será el presente y al otro lado, el oscuro futuro que le depara a nuestra querida ciudad. Deberemos explorar junto con Crisbell y Matías inhóspitos lugares, pueblos con encantos y grandes amigos que no dudarán en ayudarte.
La jugabilidad, en mi caso PC, se reduce a cuatro o cinco teclas en el teclado y no habrá necesidad de usar el ratón. Sorprende un poco que a la hora de interactuar con objetos y personas tengamos que hacer uso de la tecla Z, normalmente dicha acción es realizada por la tecla Enter o incluso E.
Cabe destacar que de nuevo la Z hace acto de presencia en las batallas, pues con ella manejamos el combate. La disposición de las teclas me ha resultado un poco incómoda, pero hay que recordar que es una demo y en PC, quizás esto cambie o podemos llegar a modificar su disposición a nuestro gusto y en otras plataformas puede ser más cómodo su manejo.
Para viajar en el tiempo no será necesario ningún objeto o portal, pues en la misma pantalla tendremos la visibilidad de todas las épocas. Tan solo tendremos que desplazarnos a la izquierda para disfrutar del pasado o a la derecha para vislumbrar el terrible futuro que nos deparará. Matías te será de gran ayuda.
Él también se moverá en el tiempo con nosotros e incluso su desplazamiento supondrá una gran ayuda, pues, aunque tiene un límite de lejanía, puede viajar un poco más libre que Crisbell ya que ella solo puede observar el paso del tiempo y Matías puede llegar a moverse en la época seleccionada.
Es aquí donde Cris Tales se asemeja a Chrono Trigger, aunque de manera más fluida. Poder enviar a nuestros enemigos tanto al pasado (izquierda) como al futuro (derecha) nos da un increíble abanico de posibilidades, ya que estos enemigos retrocederán o avanzarán en el tiempo, volviéndose más jóvenes o viejos según a donde los lancemos. Esto implica que sus estadísticas serán modificadas, y deberemos saber qué nos beneficia más. La verdad que esta mecánica es increíblemente interesante y, como os digo, da muchísimo juego en los combates.
Un mundo lleno de color
Cris Tales tiene un gran trabajo detrás, ya que posee un arte 2D dibujado a mano tanto de los personajes como de los escenarios. Esto es lo que diferencia este título de otros JRPG. Le sienta como anillo al dedo, ya que nos muestra a través de vivos colores la dulzura e inocencia de su historia y protagonista.
Puedes percatarte de su increíble paleta cromática conforme pasas de una época a otra. En el pasado, unos tonos muy cálidos, llegando incluso a ser un poquito anaranjados, inundan el escenario. En el caso del presente, se tornan un poco más pálidos, pero sin perder esa esencia acogedora. Finalmente, el futuro, fríos, grises y sin un ápice de los colores del pasado.
Tanto en los combates, como a la hora de explorar, siempre habrá música de fondo. Cómo es lógico, en las batallas destaca una música con un tempo más vivo para meternos en situación, por lo contrario a la hora de aventurarnos por los escenarios de exploración, pasa a ser una melodía mucho más relajada y armoniosa. Me ha llamado poderosamente la atención la ausencia del sonido ambiental, solo presente en las batallas, donde escucharemos el choque de las armas y los movimientos de evasión.
Cris Tales es un gran homenaje a los JRPG clásicos con una nueva perspectiva. Poder ver el pasado, presente y futuro a la vez y en la misma pantalla, es un reclamo por sí solo. Conforme avancemos en la aventura y tomando decisiones sobre el presente y el pasado, veremos cómo el futuro que vamos labrando, toma forma. Todo un título al que seguirle la pista y jugarlo en cuanto salga el 17 de Noviembre de este 2020, pues tiene todos los ingredientes para ser una de las sorpresas del año.
