Impresiones de Knight’s Destiny. Caballeros y mazmorras

Impresiones de Knight's Destiny. Caballeros y mazmorras

Knight’s Destiny nos trae una propuesta que a más de uno que empiece a peinar canas le podría recordar al clásico de 1989 Prince Of Persia. En aquella ocasión recorríamos las mazmorras de un castillo, solventando obstáculos y enfrentándonos a algún que otro enemigo. Esa es la sensación que me ha quedado al empezar a jugar esta aventura de Tech Dream.

En algún lugar de una mazmorra de cuyo nombre no quiero acordarme

¿Cuál es el destino de este caballero? Si en aquella lejana y mítica aventura que he mencionado y que recordaba a los cuentos de las mil y una noches, donde encarnábamos a un héroe que debía rescatar a una princesa de las garras del malvado visir Jaffar, y no, no estoy hablando de Aladdin, sigo hablando de Prince Of Persia. en Knight’s Destiny nos ponemos bajo la armadura de caballero que deberá superar las diferentes estancias de una mazmorra, para resolver los interrogantes que han dejado la desaparición de su mejor amigo.

Tras despertarnos en una mazmorra, empezaremos nuestra aventura

La descripción que os he otorgado sobre esta aventura es un resumen sobre la sinopsis que he encontrado en Steam, ya que cuando me he hallado en los primeros compases de este título, he visto como mi caballero se levantaba en una mazmorra, sin más, sin saber ni cómo ni cuándo ha llegado a aquel lugar lúgubre. Tampoco hallé ninguna línea de diálogo que me pusiera en el contexto de los acontecimientos previos.

“Oficio” y caballero

Una vez levantados nos ponemos en marcha, enfundándonos nuestro mono de trabajo, en este caso nuestra reluciente armadura y nuestro yelmo, nos empezamos a familiarizar con unos controles sencillos mediante el teclado de nuestro ordenador, básicamente, los botones de dirección, un botón para saltar y otro para realizar una acción. Estos son y serán ya que no tendremos opciones de configuración.

En Knight’s Destiny deberemos recorrer las estancias de la mazmorra

El siguiente paso: superar los primeros obstáculos. Éstos los resolveremos mediante el movimiento de grandes bloques, el derribo de paredes falsas, sorteando trampas en donde grandes rocas nos podrán aplastar o donde el suelo se podrá hundir y dejarnos achicharrados por los fuegos de algún horno o atrapados en fosos sin salida, obligándonos a reiniciar el nivel.

Deberemos también activar baldosas y palancas que nos abran las puertas que nos llevará al siguiente nivel, a veces deberemos activar los mecanismos en un orden determinado, eso sí, para celebrar las victorias, nuestro caballero de reluciente armadura nos deleitará con un bailecito que nada tendrá que envidiar a Tony Manero.

Nuestro caballero nos deleitara con un baile cada vez que superemos un nivel

Para resolver algunos enigmas también contaremos con mapas y pistas que nos ayudarán a aclararnos en aquellas estancias más grandes y que nos indicarán dónde ir y qué buscar, aunque a veces para resolver alguna de estas pistas deberemos exprimir bien los sesos para que las neuronas hagan el resto.

En Knight’s Destiny hay lugar para la exploración. Moviéndonos por las estancias y buscando las soluciones para superar los diferentes niveles, encontraremos bifurcaciones que nos desviarán del camino y nos llevarán a recolectar tesoros que se traducirán en una mayor puntuación. Ello aporta un componente arcade al juego ya que si queremos ser el mejor de los mejores entre todos los caballeros deberemos encontrar todos esos tesoros ocultos.

En las mazmorras nos esperan tesoros escondidos

La acción del juego transcurre en una perspectiva de paralaje, lo que permite dar una sensación de profundidad a los escenarios y movernos por huecos en las paredes que a vista del jugador son inexistentes. Estos secretos sin duda alargarán la aventura, también cabe decir que la duración del título dependerá de nuestras dotes de deducción y pericia a la hora de resolver los enigmas.

Algo a recalcar es que el título tiene opción multijugador, pero inhabilitada, pudiendo ser debido a que la versión que he analizado es un acceso anticipado. Por lo tanto, no puedo decir en que se basa esta modalidad que bien podría ser simplemente una manera de visualizar nuestra puntuación y compararla con la de otros jugadores, dejándome la incógnita de que pueda tratarse de algo más interesante.

Las pistas que encontremos serán importantes para superar algunas fases

Un título en construcción 

La principal sensación que he tenido con Knight’s Destiny es el no saber si el personaje que controlaba llevaba un yelmo en la cabeza o de lo contrario un casco de obra. Tras unos primeros niveles donde el título rendía bien, a medida que he ido superado fases en estancias cada vez más grandes, he notado que el juego sufría, se ralentizaba y le costaba cada vez más cargar las texturas.

A la dificultad de ciertos puzzles se le añadían ciertos fallos en la delimitación de los escenarios, en suelos y paredes que literalmente me sacaban del juego, congelando la aplicación y obligándome a salir de ella. Estoy hablando de unos errores graves, capaces de arruinar completamente la experiencia de juego. Ello me ha obligado a sortear no solo las trampas de la mazmorra, sino también los bugs.

Algunos bugs me han arruinado la experiencia de juego

Cabe decir, una vez más, que he probado el acceso anticipado que ofrece Steam, pero a pesar de encontrarnos ante una versión temprana del juego, o eso quiero pensar, a Tech Dream le queda mucha tarea por hacer y mucho por pulir, si lo que se quiere es ofrecer una experiencia mínimamente satisfactoria.

A estos bugs deberemos añadir el problema que existe con ciertas físicas, y es que los bloques que tendremos que mover y que además forman una parte sustancial en las mecánicas del juego, no se perciben sólidos. Los bloques muestran un comportamiento extraño, rebotan, se deslizan como si estuviera sobre una pista de hielo y a veces parecen tener vida propia. Muchas de las muertes de mi personaje han tenido como autor homicida un bloque, que de manera extraña rebotaba sobre mi caballero mientras lo empujaba.

Los árboles me impidieron ver el bosque

Los árboles eran aquellos fallos que he comentado anteriormente. El bosque es aquel apartado gráfico y sonoro que puede quedar oculto como los tesoros que deberemos encontrar en Knight’s Destiny. No solo un bosque visual, sino también sonoro, y es que cada fase va acompañada de melodías medievales que amenizan nuestras incursiones en las mazmorras.

En ocasiones los bloques actuaran de forma extraña

Como he dicho, encontramos un apartado gráfico correcto en lo estético, con colores apagados en donde las tonalidades sepias son dominantes y que ayudan a la ambientación de la aventura, dejándonos inmersos en una sensación de soledad en las estancias.

Estamos ante un apartado gráfico correcto en lo estético, bonito, pero sin robustez, debido a los fallos de rendimiento y a la caída de frames que me he encontrado en ciertos puntos. De hecho, he podido hacer la prueba, de cómo en lugares exactos, el juego se ha ralentizado y ha tenido sus fallas, comprobando así que no me enfrentaba a errores aleatorios. Se podría decir que a veces menos es más y en muchas ocasiones la estabilidad es mucho mejor que la belleza.

Abrasado por las llamas en una de las múltiples trampas que encontraremos

Lo malo es que la configuración de los colores y de los elementos, se repiten una y otra vez en las diferentes estancias, dando la sensación de que estamos encerrados en unas mazmorras infinitas, convirtiendo Knight’s Destiny en un título monótono y  donde no se aprecia una sensación de progreso ni en nuestra aventura, ni en nuestro personaje. Tal vez el cambio de otra paleta o configuración en los escenarios o incluso en el skin de nuestro personaje, adquiriendo nuevas piezas de armaduras, hubieran ayudado a dar más dinamismo a la aventura.

Knight’s Destiny es un título con buenas ideas, que puede resultar desafiante con sus pequeñas dosis de dificultad. Con estos argumentos los jugones como yo siempre estaremos prestados a jugarlo y a darle una oportunidad ya que con sus defectos el potencial está ahí.